Ha pasado un año desde que mi esposo se fue.Makiko actuaba fuerte frente a su hijo, pero por otro lado, pasaba sus días distrayendo su soledad con la masturbación.El día de su vigésimo cumpleaños, el hijo de Makiko, que no soportaba ver tal cosa, decidió apoyar a Makiko no como hijo, sino como hombre.Makiko está desconcertada por su hijo, que la abraza a la fuerza y ​​la acaricia, pero su cuerpo hambriento se niega a negarse.Si es solo una vez...Makiko decide aceptar.Sin embargo, mi hijo es una persona inigualable que puede disparar cualquier cantidad de tiros seguidos.